Confianza y Seguridad

Un día a Pedrito se subió al bus de vuelta a su casa sentándose al lado de él un halo de frustración sabor café bien tinto, es decir, ¡bien amargo!

Se encontró en el food court a una bella dama a quien la noche le prestó negro a su pelo y el mar verde esmeralda su mirada. 

La dejó ir.

El profesor hizo una pregunta que nadie (por no estudiar) quiso responder pero él tampoco aunque se sabía de memoria la respuesta.

A una compañera se empezó a marear: él tenía el estetoscopio y el esfigmomanómetro y aún así se quedó viendo visiones como si el fuera arquero del Barça y Cristiano le hubiera disparado un misil de 50 metros. 

Pedro no es tonto, es mas, es brillante, amable, respetuoso, berraco y noble, ¿qué le pasó? ¿Por qué se paralizó ante estos dos escenarios?  A Pedro le faltó el ingrediente secreto que hace que un cojo pueda bailar, un ciego pueda tocar un piano y dos hermanos puedan volar sin necesidad de marihuana: eso se llama confianza.

Andy Pettite. Pitcher de los New York Yankees. Puse su foto por su seguridad en el 

montículo a la hora de lanzar.

No es que Pedrito sea feo, no es porque no tenga un Roll Royce, dejó ir a la ojiverde ardiente porque le faltaron agallas.

Tuvo miedo de decir alguna palabra mal, por eso no respondió la pregunta que hizo el profe.

Pensó que iba a meter la pata, por eso no atendió a su compañera mareada.

Eso le falta a Pedro: confianza.

¿A que se debe la falta de confianza de Pedro?

1) Padres: la mayoría de padres tienen demasiado miedo de que su hijo mete la pata, por eso le dice que no haga esto o aquello; lo mas lamentable de todo esto es que lo hacen sin pensar, solo por impulso.

que ustedes peguen un grito en el cielo. Hasta Dios comete errores de vez en cuando.

Asi que: Verónica, Alexandra, Katherine, Tammy, Elizabeth, Natalia, Esteban, Pamela, Nicole: dejen de perder la cabeza y si su hijos meten las patas. 

2) Nervios: cuando el sistema de lucha y huida se dispara, por lo general el cerebro intentará buscar la solución mas rápida mas no las mejor. Como no nos estamos dando en la jeta con un oso, nuestro cerebro elegirá huir como si hubiera visto a la suegra disfrazada de doña Florinda. Cuando vio Pedro vio a la ojiverde el cronotropismo e inotropismo positivo, su pequeña pero incómoda erección y la sombría relación con sus compañeras del colegio, sus hermanas y algunas de la universidad lo engañaron y no supo qué hacer. 

3) Baja autoestima: yo no sé por qué las mayoría de las personas se empeñan en buscar a un imbécil en sus espejos. Esto no es más que el resultado de muchos dilemas sin resolver dentro del corazón guardados en bolsas de resentimientos y miedos. 

4) Profesores con ínfulas de Premio Nobel de Medicina: me refiero al profesor que siempre ve lunares negros en cartulinas blancas. Si usted dijo paso a paso los mecanismos de regulación de presión, le pregunta de dónde lo sacaste, de los que le señala un error y le dice que revise el libro, de los que ponen ceros gigantes por no decir las cosas como el piensa que son, de los que quieren respuestas específicas a preguntas generales e incompletas. 

Le recomiendo que si usted tiene un profesor así y sus probabilidades de repetir materia son altas, no matricule con un profesor así, porque además de adolecer de habilidades pedagógicas y tener su ego en Saturno, recuerde que las malas mañas se pegan más rápido y usted es susceptible de portarse igual de idiota que su "profe" con sus pacientes. 

5) Falta de experiencia: lo dije ayer. Para aprender algo hay que repetirlo una y otra vez. Con respecto a las tomas de presión y pulsos, ¡hágalo varias veces! 

6) La mala energía de amigos, hermanos, etc: dime con quién andas y te diré quién eres. A veces la falta de confianza se padece debido a que usted decide aguantarse la basura y mentalidad de perdedor de otras personas. 

Ya descubrimos los síntomas y manifestaciones "clínicas" de la falta de confianza. Así le inyectaré un suerito pa' que se le suba otra vez.

Láncese, simplemente láncese. Del mismo modo que Brian Roberts no puede ver segunda o tercera sin pensar en robársela, métase a la candela. No pasa nada. 

Cuando vea a aquella bella dama sentada solita en la plaza de comidas, ¡atáquela! Si la ve en una fiesta, pídale al DJ que suene algo de Marc Anthony o Grupo Niche y sáquela a bailar. 

Si se sabe la respuesta a la pregunta de un profe, limítese a responderla no importa si quien le da clases es un cabrón. 

Si a su compañera se le van las luces, ¡actúe de inmediato! Embarrarla es mejor que no intentarlo.

Las grandes proezas del mundo se realizaron gracias a esas personas que llenaron su corazón y sobre todo sus enormes cabezas de confianza. 

Tenga fe. Si usted no la tiene su paciente no dejará que usted lo toque así su diploma lo haya conseguido en Yale. 

Tírese. Láncese. No le haga caso ese incómodo cronotropismo e inotropismo positivo. Si no puede evitarlo, haga como el caballero de la foto (Andy Pettite): respire profundo y ahí sí mándese.

Confianza y mas confianza. Un poco mas de confianza hará a este planeta mas bonito y vivible.

Si duda de lo que digo, quizá Diego Torres se lo puede dejar mas clarito.